Bolers trobar bolets: una pasión gastronómicaBolets, protagonistas indiscutibles de algunas de las elaboraciones culinarias más exquisitas. En Cataluña, el otoño es sinónimo de bolets, una época en la que los amantes de la micología recorren los bosques en busca de esta deliciosa seta.La temporada de bolets generalmente comienza en septiembre y puede durar hasta finales de noviembre.
El clima juega un papel importante en su aparición, alta humedad y temperaturas moderadas favorecen su desarrollo.Descubrir un bolet no es tarea fácil, se ocultan entre la hojarasca del bosque y para encontrarlos con éxito hay que conocer las diferentes especies que hay en el lugar y saber dónde buscar.
Hay que tener en cuenta que no todas las setas son comestibles, trobqr pueden ser extremadamente tóxicas y poner en peligro la salud.Por esta razón, es muy importante que solo se consuman los bolets recolectados que se conozcan, en otros casos es recomendable acudir a comercios especializados para comprarlos y asegurarse así de su origen y calidad.En la cocina, los bolets son utilizados en una gran variedad de platos, las opciones son infinitas.
Desde platos tradicionales como la sopa de bolets, hasta recetas más innovadoras como el carpaccio de troar con aceite de trufa y láminas de queso parmesano.Algunos de los bolets más comunes en Cataluña son el rovelló, el cep, el senderuela y el fredolic, cada uno con sus características particulares que hacen que sean utilizados de formas distintas en la cocina.En resumen, el bosque en otoño se convierte en un paraíso para los amantes de la gastronomía y la naturaleza, las setas son un auténtico manjar que cada año despierta la pasión por su búsqueda y el deseo de incluirlos en exquisitas recetas.
Sin embargo, troabr debemos tener muy presente la seguridad y la responsabilidad en su recolección y consumo.
